El ser humano es más feliz cuando conecta con su interior ya que es en este autodescubrimiento en donde encuentra su propio centro. Las emociones son un pilar importante de la felicidad y este concepto también está directamente vinculado con la cosmética. Este es el ejemplo de la nueva tendencia que recibe este nombre: cosmética emocional. Existen distintos factores que influyen de forma negativa en el estilo de vida y en cómo se siente una persona: el estrés es una experiencia que se convierte en limitante cuando se torna frecuente.
Cosmética que alimenta tu bienestar
Además, la incertidumbre de futuro también llega a resultar incómoda para quien convive con esta percepción del mañana. La cosmética emocional se asienta sobre la base del cuidado integral cuerpo-mente. Este tipo de cosmética presenta formulaciones desarrolladas a partir de propiedades que nutren la piel y el bienestar personal. Una de las claves que diferencia esta innovación en el ámbito de la cosmética es su enfoque holístico.
Una de las firmas que se ha posicionado como un referente en este sector es The Emotions Lab® que, a través de su página web, sintetiza la esencia de esta propuesta: el cuidado emocional de la piel. Las emociones te acompañan a lo largo de los días. Algunas emociones y sentimientos te ayudan a conectar con la alegría, pero también existen otras experiencias que no producen este agrado.
Desde este punto de vista, para reforzar el cuidado de la piel, atendiendo a sus necesidades, también es importante atender el interior.
Cosmética holística
Este tipo de cosmética tiene una visión integral del ser humano, comprende el bienestar desde una mirada holística. El estado de ánimo, por ejemplo, tiene su reflejo en la piel. La sonrisa exterior, por tanto, conecta con el bienestar interno cuya luz se refleja en el rostro.