La piel es una de las partes del cuerpo que más cuidado necesita, factores como la contaminación, el sol, el tabaco o una mala alimentación puede afectar seriamente a la epidermis afectando al cutis. Cada mujer es un mundo, y con la piel sucede lo mismo, en función de las características del cutis, las necesidades serán diferentes.
Una piel cuidada y equilibrada debe tener un porcentaje de agua adecuado que le permita mantener la elasticidad, la firmeza y la tersura adecuada. Un cutis perfecto está condicionado por un cuidado correcto tanto de higiene como de protección e hidratación con los productos que recomiendan los expertos.