Con la llegada de la Navidad comienza el consumismo compulsivo y la invasión de anuncios de las principales firmas de ropa, belleza y complementos para animarnos a adquirir cualquiera de sus productos. Es una época de excesos en la que bebemos y comemos demasiado y compramos muchas cosas que después no utilizamos, así que antes de nada mejor asegúrate de que realmente necesitas ese producto o si se trata de un regalo, que encaje con los gustos y las necesidades de esa determinada persona.
En este sentido el perfume es un obsequio muy personal y en el que deberemos tener en cuenta aspectos como el PH de la piel que es diferente en cada persona, al igual que el propio olor corporal, factores que influyen en el aroma de un perfume.